jueves, 6 de febrero de 2025

La casa de Victoria Ocampo

 

La casa de Victoria  se adentra en los pasillos iluminados de un espacio cargado de historia y emoción. Los pasillos, que parecen susurrar relatos de infortunio y nostalgia, se convierten en un refugio de silencio y reflexión. Aquí, el tiempo se disuelve entre sombras y luz, creando un ambiente donde la sed de calma se mezcla con la inevitabilidad del paso del tiempo.

El alejamiento, tanto físico como emocional, se convierte en un tema central. Este concepto penetra en aquellos que se marchan y tiñe de un ardor silencioso y permanente las huellas de quienes dejan el lugar. La sensación de partida se impregna en las paredes, en las huellas dejadas, en los recuerdos que se difuminan lentamente.

A través de la lente de la cámara, se busca capturar esa transición entre el estar y el irse, el cambio de espacio y el de estado emocional. Las imágenes no solo cuentan la historia de un lugar, sino también de lo que queda atrás: la resonancia de las presencias que ya no son y la melancolía de los ausentes.

Este proyecto busca explorar la fragilidad de los vínculos, la memoria del abandono y la belleza oculta en los rincones que cargan consigo la huella del tiempo y las emociones que se han vivido entre ellos. La casa de Victoria se convierte así en una metáfora visual del paso de las personas y la eterna quietud de los espacios que las acogieron.













jueves, 30 de enero de 2025

Comedor ancestral

Me vi en sueños en el comedor de la casa de mis ancestros. Aunque no se parecía en nada a la casa real, había algo en el ambiente que me conectó profundamente con mi historia. Ante todo, el espacio era muy pequeño, casi reducido, y solo tenía una ventana. En la pared de enfrente, estaba adosado lo que parecía el ceibo, un árbol que formaba parte de mi memoria familiar.

En la habitación, estaba dispuesta una larga mesa, preparada para recibir a mis parientes. Al tomar la foto, me invadió una oleada de emoción, y no pude evitar llorar. La imagen, aunque fugaz, capturó algo mucho más grande que solo una escena; fue un vínculo entre el pasado y el presente, una reconexión con mis raíces, mi herencia y el tiempo compartido con los que ya no están.

Este proyecto busca, a través de la fotografía, explorar la memoria, el legado familiar y los espacios que nos definen. A través de cada imagen, intento captar no solo la apariencia de los lugares, sino también la emoción, el eco de las vivencias y los recuerdos que habitan en ellos.




Blue Feeling

«Blue Feeling» encapsulates the emotional spectrum of melancholy, introspection, and calmness often associated with the color blue. It’s a deep exploration of human emotion—both its heaviness and its serenity—through visual and sensory art that evokes the universal experience of feeling «blue.»




Faces on Rails

 «Faces on Rails» is a photographic project that delves into the essence of everyday life aboard Lisbon’s iconic trams. By capturing spontaneous portraits, intricate details, and fleeting moments of connection with the city, the project seeks to reflect the rich tapestry of cultural diversity and human emotions that unfold within these moving spaces.
The trams, with their rhythmic motion and nostalgic allure, serve as both a backdrop and a vessel for stories in transit. This work explores the contrast between the bustling energy of the tram and the quiet, introspective stillness of its passengers, creating a dialogue between movement and pause, community and solitude.
Through this project, I aim to celebrate the universal yet deeply personal stories of those who ride the rails, framing them within the timeless charm of Lisbon—a city where history and modernity merge seamlessly, much like the lives captured within these frames.











jueves, 24 de febrero de 2022

Del ganchillo al Prozac. Relatos cortos

60 metros cuadrados, el Blue Note jazz club de a Coruña 

Una mesa de distancia me separa de Mr Sax y su combo. Presentación programada por el legendario bar club de Jazz en calle ciega del Orzán.

Pagué10 € para entrar al recinto y reposar una cerveza sobre la superficie de la mesa de coser Sigma que decora el lugar sin saber lo que me esperaba.

Antes de comenzar la función reconocí inmediatamente a los franceses asiduos al bar sentados en unos de los laterales. La srta ganchillo me sonría mientras tejía una bufanda escuchando la música sin parar.

En otro extremo un hombre discutía con su mujer, la srta prozac. La actitud impaciente de la pareja resonaba en el espacio repercutindo en el saxofonista. Mr sax interrumpió con un gesto desafiante para decirles " ahora toco yo". 

Huérfana de piedad, la música se convirtió en un depresivo como protagonista para la srta prozac. Resultando de todo ésto que el Sr Alberto tuviera que recoger las copas abandonadas sobre la escena.

Contrariamente a este evento, recordé a un músico desafiante con su música pero amable,Wayne Shorter. Junto a Hancock, Clarke y Hakim celebramos lo extraordinario de la música del cuarteto con la gentileza  expresiva y sensible de un gran hombre, gracias Wayne!


                                   



















lunes, 19 de abril de 2021

Deshabitar un espacio

HACE UN AÑO DE TODA ESTA LOCURA DEL COVID Y ME ENCONTRÉ CON ÉSTAS IMÁGENES POR COMPARTIR. EN VERDAD HAY RAZONES POR LAS QUE EL ENCIERRO PRODUCE ESTADOS INIMAGINABLES. AQUÍ LES DEJO ALGUNAS DE ELLAS











lunes, 4 de mayo de 2020

Testimonios Objetuales





Jiří Wolker comenta: “Amo los objetos, compañeros taciturnos, porque todos tratan con ellos como si no estuvieran vivos.”
Franz Werfel escribió: “Tranquilos objetos, que en una hora plena, he acariciado como fieras mansas.”
Retratos de lo inadvertido. Testimonios objetuales
En el intento de recuperar el ropaje de las cosas que silenciosamente acompañan nuestra cotidianidad, esta serie logra escenificar la identidad oculta de los objetos registrados en un hogar.
La intencionalidad dramática en el uso de la luz reflejada en el paisaje doméstico constituye el testimonio de los objetos en el paso del tiempo de los momentos vividos.

Concebida como una estampa de la permanencia, el encuadre de lo inanimado en el paisaje fotográfico genera el poder de visualizar la huella de la temporalidad latente en las dinámicas familiares y humanas presentes en nuestro haber.ella de la temporalidad latente en las dinámicas familiares y humanas presentes en nuestro haber.